Distintas fuentes extraoficiales coinciden en asegurar que cientos de militares, funcionarios, legisladores y empresarios dominicanos estarían vinculados con el caso de José Figueroa Agosto y que Estados Unidos tiene en la mirilla.
Una revista dominicana destaca “la presencia, escasamente disimulada, de diez agentes federales de los Estados Unidos investigando pacientemente a funcionarios, militares y grandes legisladores dominicanos no sólo por el lavado de narcotráfico sino por otros comportamientos vinculados a la gestión de fondos públicos”.
Se trata de Gaceta Judicial, en su edición de septiembre, que en su trabajo principal, titulado “Leonel Fernández, entre ángeles y demonios”, asegura que mal haría el jefe de Estado en tratar de repostularse en 2012. José Luis Taveras, director de la revista, firma el trabajo de nueve páginas.
Pero alguien pone números precisos, aunque no así nombres y apellidos. Angel Martínez, un dominicano residente en Nueva York, que se identifica como un detective muy informado en materia de narcotráfico y delitos federales, presenta el siguiente inventario de los supuestos cómplices de Figueroa Agosto:
Doscientos setenta y siete militares y policías, entre miembros de la Marina de Guerra, de la Policía Nacional, la Dirección Nacional de Control de Drogas y la Dirección Nacional de Investigaciones.
Continúa: 93 empresarios, siete gerentes de bancos, 15 empleados bancarios, 10 concesionarios de vehículos, ocho compañías constructoras, cinco dueños de supermercados y 19 casas de cambio. Para cerrar: 22 políticos “de alto y mediano rango” y ocho diputados.
“No crean ustedes que los ocho gaticos esos que están involucrados es el fuerte de Figueroa Agosto”, dijo Martínez en una llamada telefónica del programa Huchi Lora y el Equipo, que transmite de lunes a viernes CDN La Radio.
Según sus indagatorias, fueron las autoridades federales de los Estados Unidos las que suministraron esta lista a las dominicanas para que sometieran a estas personalidades, con la finalidad de que no pasara como en el caso del narcotraficante extraditado a Nueva York, Quirino Ernesto Paulino Castillo, en el que quedó siempre en misterio la lista de “pejes gordos” de la que se hablaba.
¿“Cantó” o no Figueroa?
Según el detective Angel Martínez, José David Figueroa Agosto, preso en Puerto Rico desde julio pasado, negoció con el Buró Federal de Investigaciones (FBI) y le dio “demasiado información” de las redes de narcotráfico y lavado de activos en República Dominicana y Puerto Rico.
Estas declaraciones, sostiene, garantizaron un cierre exitoso a dos años de investigación que dirigió Estados Unidos sin notificar a la Policía puertorriqueña y que dio como resultado el apresamiento de los 133 agentes boricuas detenidos en esta semana.
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