La tragedia del barrio neoyorquino de Harlem comienza a tener nombres y apellidos un día después de que una explosión de gas derrumbara dos edificios, lo que dejó un trágico balance de siete muertos, temiéndose que uno de ellos sea dominicano.
Mientras continúa la búsqueda de cinco desaparecidos y la zona intenta recuperar la calma.
De los ocho cadáveres encontrados hasta ahora por los bomberos ya han sido identificadas cinco personas, el último de ellos un músico de nacionalidad griega llamado Andreas Panagopoulos.
Por otro lado, se presume que al menos otro de los fallecidos es de origen dominicano, aunque aún no se ha confirmado oficialmente ni se conoce su identidad, según dijo un portavoz del consulado dominicano, mientras que la séptima víctima mortal podría ser de nacionalidad japonesa.
El alcalde de la ciudad de Nueva York, Bill de Blasio, dijo que las tareas de rescate continuarán los próximos días con la esperanza de encontrar a alguien con vida.
Las autoridades tuvieron que evacuar un total de 89 apartamentos y tres establecimientos en la zona de la explosión, en el corazón del Barrio latino de Harlem, aunque ninguno de los edificios tiene problemas estructurales, mientras que 66 personas pasaron la noche en un centro de acogida temporal de la Cruz Roja situado en la calle 125.
Entre los cinco desaparecidos se encuentra Chris Jiménez, de 15 años, y otro joven identificado como Jordy Salas, estadounidense de origen ecuatoriano de 22 años.
La tragedia de Harlem ha vuelto a reabrir el debate sobre el mal estado en que se encuentran muchas infraestructuras en la ciudad de Nueva York, ya que al menos uno de los edificios derrumbados tenía decenas de quejas de los vecinos, ya que presentaban grietas en las paredes y problemas en la red de gas.
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